viernes, octubre 27, 2006

AURORA

Por Celina Kofman

Aurora, mi compañera, mi amiga, mi hermana. Te fuiste en un soleado día, casi en primavera, con ese sol que tanto buscabas...
Pero, para mí, compañera, sigues estando entre nosotras.-
Peleaste con la fuerza de un león y la coherencia de una revolucionaria, digna madre de Humberto y de nuestros 30000 hijos.-
Peleaste también como un león contra una enfermedad tan cruel que te segó la vida.-
Jamás olvidaré los 30 años compartidos, de lucha hermanada contigo y con Máximo a quien llamo con cariño “LA MADRAZA”, por su apoyo, su fuerza, su claridad política y que nos permitió seguir en la lucha por la Memoria, la Verdad y la Justicia. Hasta sufrimos juntas en nuestra difícil decisión de dejar la Asociación por diferencias muy profundas con Hebe.-
Aurora; estarás siempre al lado de los que luchan por nuestros hijos, marcando el camino de la liberación.-
¡Cuantos años compartidos! ¡Cuantas tristezas y alegrías! ¡Cuantos momentos de reflexión, de altos en el duro camino que nos tocó transitar, para recobrar fuerzas y seguir adelante!
Seguiremos adelante, marchando con nuestros hijos y con los nuevos hijos de esta generación que nos sorprenden y nos inundan de amor al encontrar semejanzas increíbles con los nuestros, Seguiremos adelante con los compañeros sobrevivientes de la década del 70 y que nos rodean para no dejarnos caer. Seguiremos adelante con tu nieto querido, con los míos, con los nietos recuperados, con los hijos de nuestros hijos.-
Aurorita: donde estés, seguramente muy cerca de Humberto seguirás dándome fuerzas para que no me abatan los años que tengo, para que no se sequen mis lágrimas ni se desdibuje nuestra sonrisa. Te tendré siempre en mi corazón y en mi lucha, a ti y a Máximo con quien no perderemos contacto, pues son mis amigos, mis compañeros, mis hermanos y los de mi familia.-
Que descanses en paz y bien fuerte a dúo “¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!”